El mundo despide al Papa Francisco, un líder humilde y cercano que marcó una era con su mensaje de paz, justicia y fe profunda.

Falleció el Papa Francisco: el mundo despide a un líder de fe, humildad y cercanía
Un argentino que transformó la Iglesia con gestos simples y poderosos
La noticia de la muerte del Papa Francisco, el primer pontífice latinoamericano y argentino, ha conmovido profundamente al mundo. Jorge Mario Bergoglio, como se lo conocía antes de asumir el papado, deja una huella imborrable por su compromiso con los más humildes, su mensaje de fraternidad universal y su estilo pastoral cercano y humano.
Desde su elección el 13 de marzo de 2013, Francisco se convirtió en una figura clave del siglo XXI, no solo para los católicos, sino para toda la humanidad. Su paso por el papado estuvo marcado por gestos de humildad, reformas profundas dentro de la Iglesia y una incansable lucha por la paz, el cuidado del planeta y los derechos de los excluidos.
Su vida: del barrio porteño de Flores al Vaticano
Nacido el 17 de diciembre de 1936 en Buenos Aires, hijo de inmigrantes italianos, Jorge Bergoglio fue un sacerdote jesuita profundamente comprometido con la realidad social de Argentina. En 1998 fue nombrado arzobispo de Buenos Aires, y en 2001 se convirtió en cardenal. Conocido por recorrer villas, viajar en colectivo y rechazar lujos, fue siempre un pastor del pueblo.
“Quiero una Iglesia pobre para los pobres”, dijo apenas asumió como Papa.
Su elección como sucesor de Benedicto XVI fue histórica: no solo fue el primer Papa americano, sino también el primer jesuita y el primero en tomar el nombre de Francisco, en honor a San Francisco de Asís, el santo de los pobres y la paz.
Un legado de amor, diálogo y justicia
Durante su papado, Francisco impulsó una Iglesia más abierta, dialogante y activa frente a los grandes desafíos de la humanidad. Denunció la indiferencia global ante la pobreza, defendió a los migrantes, habló del cambio climático como “una crisis moral” y pidió “tender puentes, no levantar muros”.
“No se olviden de rezar por mí”, repetía al final de cada discurso, con la sencillez que lo caracterizaba.
Entre sus documentos más influyentes se encuentran Laudato Si’, sobre el cuidado del planeta, y Fratelli Tutti, un llamado a la fraternidad universal.
Un adiós que conmueve, pero deja esperanza
Su partida deja un vacío inmenso, pero también un camino claro: seguir construyendo un mundo más justo, fraterno y solidario. Desde La Rioja y toda la Argentina, lo despedimos con gratitud y emoción, reconociendo a un hombre que supo llevar la palabra de Dios a todos los rincones, con humildad, valentía y compasión.
“Servir es reinar”, decía Francisco. Y sirvió hasta el final.
Que descanses en paz, querido Papa Francisco. Tu luz seguirá guiando a millones.