El futuro ministro de Economía se reunió con autoridades y empresarios de Estados Unidos para presentar el plan económico del próximo gobierno, que promete ortodoxia fiscal, apertura comercial y libre flotación cambiaria.
Luis Caputo, el próximo ministro de Economía de Javier Milei, visitó recientemente Estados Unidos para reunirse con autoridades financieras y representantes de bancos y fondos de inversión. Su objetivo fue transmitir confianza y credibilidad en el plan económico del futuro gobierno, que asumirá el 10 de diciembre.
Caputo, que fue secretario de Finanzas y presidente del Banco Central durante la gestión de Mauricio Macri, es considerado un hombre de mercado y un experto en negociaciones con acreedores externos. Su designación fue bien recibida por los inversores, que ven en él una garantía de ortodoxia y disciplina fiscal.
Durante su visita a Washington y Nueva York, Caputo se reunió con funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI), del Tesoro estadounidense, del Banco Mundial y de la Reserva Federal. También mantuvo encuentros con ejecutivos de JP Morgan, Goldman Sachs, BlackRock, Templeton y otros grupos financieros con intereses en Argentina.
Según trascendió, Caputo les explicó las principales líneas del programa económico de Milei, que se basa en una fuerte reducción del gasto público, una reforma tributaria que baje la presión impositiva, una apertura comercial que elimine las restricciones al comercio exterior y una política monetaria que apunte a la estabilidad del peso.
Asimismo, Caputo les aseguró que el nuevo gobierno cumplirá con sus compromisos de deuda y buscará renegociar los plazos y las condiciones del préstamo otorgado por el FMI en 2018, que asciende a 57.000 millones de dólares. También les prometió que se eliminarán los controles cambiarios y se permitirá la libre flotación del tipo de cambio.
Caputo regresó al país con un balance positivo de su gira, ya que logró generar expectativas favorables entre los agentes económicos y financieros. Sin embargo, también reconoció que el desafío será grande, dado el contexto de recesión, inflación, desempleo y pobreza que atraviesa Argentina. Por eso, dijo que será necesario implementar medidas graduales y consensuadas para lograr el equilibrio fiscal y el crecimiento sostenido.