Revelan que el distanciamiento social y uso de barbijos para niños no estaban basados en ciencia sólida, afectando negativamente la salud mental infantil.
Fauci admite que las reglas de Covid no estaban basadas en la ciencia
En un reciente testimonio revelado, el Dr. Anthony Fauci, quien presidió el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) durante la pandemia, admitió que las medidas como el distanciamiento social y el uso de barbijos para niños no se basaron en datos científicos. Estas revelaciones surgieron durante una audiencia a puerta cerrada ante la Cámara de Representantes en enero, donde Fauci explicó que las medidas se implementaron para generar un sentimiento de protección, más que por su eficacia comprobada.
Medidas sin respaldo científico
Fauci confesó que las recomendaciones de distanciamiento de seis pies (dos metros) y el uso obligatorio de barbijos para niños no tenían un respaldo sólido en estudios científicos. “No recuerdo haberme basado en algún estudio específico”, admitió Fauci. Estas medidas, según él, fueron decididas en discusiones internas en su oficina y no contribuyeron significativamente a frenar la propagación del virus.
Impacto en la sociedad
Las medidas implementadas durante la pandemia tuvieron consecuencias significativas, especialmente en el aprendizaje y la salud mental de los niños. Estudios del Instituto Nacional de Salud (NIH) han documentado efectos negativos, como depresión, ansiedad y retrasos en el aprendizaje, derivados del uso prolongado de barbijos y el distanciamiento social.
Repercusiones en Argentina
Las decisiones de Fauci también influyeron en otros países, incluyendo Argentina, donde se adoptaron medidas similares. La implementación de estas políticas ha generado un debate continuo sobre la gestión de la pandemia y las decisiones tomadas por los líderes de salud pública.
Las recientes revelaciones sobre las decisiones tomadas durante la pandemia subrayan la importancia de basar las políticas de salud pública en evidencia científica sólida. El testimonio de Fauci ha abierto un nuevo capítulo en la evaluación de la respuesta a la pandemia de Covid-19.